Economía circular: la vía fácil hacia cero emisiones netas

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Logo de M&G como foto de portada del artículo Dos años de pandemia: el impulso de la COVID-19 hacia una economía sostenible

Randeep Somel, gestor en el equipo de Renta Variable de M&G Investments

Por favor consulte el glosario para una explicación de los términos de inversión que aparezcan en este artículo.

La mayoría de los países han aceptado el reto de recortar a cero sus emisiones netas de gases de efecto invernadero (GEI) de cara a 2050, y la necesidad de sustituir actividades que utilizan combustibles fósiles por fuentes de energía más limpias ha pasado a un primer plano. No obstante, si queremos alcanzar este objetivo, incorporar una economía circular será tanto una necesidad como una de las oportunidades más fáciles para recortar emisiones.

Con «economía circular» nos referimos a un sistema económico dirigido a eliminar los residuos y el uso incesante de recursos. Estos sistemas se proponen reemplazar el enfoque de «extraer, producir y tirar» de los modelos de negocio lineales tradicionales por un planteamiento de reducir, reutilizar y reciclar, creando un ciclo cerrado que minimiza el uso de recursos y la generación de residuos, contaminación y emisiones de carbono. 

Desde un punto de vista económico, el sistema circular trata de prolongar el uso de productos, equipamiento e infraestructura, mejorando así la productividad de estos recursos. Los vertederos son una gran fuente de emisiones de carbono, y reutilizar constantemente los recursos para evitar tirarlos beneficia tanto al planeta como a nuestras propias finanzas.

El valor de los activos del fondo podrían tanto aumentar como disminuir, lo cual provocará que el valor de su inversión se reduzca o se incremente. Es posible que no recupere la cantidad invertida inicialmente.

La oportunidad y su envergadura

El papel crucial de la economía circular

Aunque recortar las emisiones relacionadas con la energía sigue siendo el principal factor en nuestro objetivo de alcanzar la neutralidad de carbono, la transición hacia una economía circular brinda la oportunidad de reducir las emisiones globales en hasta un 20%. Reciclar productos de todo tipo, desde el cobre al plástico, significa que ahorramos energía al no tener que minar y crear material virgen. Además, es mucho más económico reutilizar y reciclar que comprar material nuevo.

A medida que se desarrollan las regulaciones en la ruta hacia la neutralidad de carbono en 2050, no debería sorprendernos constatar el fomento y la adopción crecientes de una economía más circular. Así lo confirma un estudio de Accenture, que estima que la economía circular podría generar 4,5 billones de dólares de producción económica adicional hasta 2030. Su labor identifica modelos de negocio circulares que ayudarán a desvincular el crecimiento económico del consumo de recursos naturales fomentando al mismo tiempo una mayor competitividad.

En M&G, hemos elaborado una lista de compañías que fomentan una economía circular como parte de sus modelos de negocio:

Ball Corp es el mayor fabricante de latas de aluminio del mundo. Dado que este metal puede reciclarse una y otra vez, un 75% de todo el aluminio producido en la historia todavía está en uso. La tasa de reciclaje global de las latas de aluminio es del 69%, respaldada por el hecho de que el producto residual tiene valor económico y puede separarse fácilmente en el proceso de gestión de residuos. Solamente un 43% de las botellas de PET (plástico) y un 46% de las de vidrio se recogen para reciclado, aunque no se reciclan necesariamente.

Las mayores tasas de recolección y de reciclado de la lata de aluminio conducen a una mayor circularidad, y sobre todo reducen la cantidad de material que se incinera o va a parar a vertederos en comparación con el PET y el vidrio.

  • Impacto: Ball Corp ayuda a ahorrar 4,25 millones de toneladas (Mt) de CO2 al año. Esto equivale a retirar 945.000 coches con motores de gasolina de las carreteras durante un año[1].

Brambles es una compañía logística activa en más de 60 países. Opera una plataforma de más de 300 millones de cajas y palés que constituyen el eje central invisible de cadenas de suministro globales, sobre todo en los sectores de bienes de consumo de alta rotación, productos perecederos, bebidas, comercio minorista y fabricación general. Las mayores marcas del mundo confían en Brambles para ayudarles a transportar productos esenciales de forma más eficiente, segura y sostenible. Sus cajas y palés están hechos de matera y se reciclan constantemente.

  • Impacto: Brambles ayuda a ahorrar 1,95 Mt de CO2 al año. Esto equivale a reciclar 650.000 toneladas de residuos en lugar de tirarlos al vertedero[2].

Darling Ingredients es un líder mundial en el reciclaje de productos cárnicos y aceites de cocina. La compañía convierte estos productos en alimentos, comida para animales, productos farmacéuticos y combustibles. El tratamiento de subproductos cárnicos permite capturar y reutilizar el carbono, en lugar de liberarlo en el medioambiente en forma de GEI. Darling Ingredients opera una red de  128.000 puntos de recogida en los Estados Unidos.

  • Impacto: En 2019, las emisiones de alcance 1 y 2* de Darling Ingredients fueron de 1,8 Mt de CO2, pero la empresa ahorró 5,5 Mt de CO2, con lo que su impacto climático neto fue de 3,65 Mt ahorradas. Esto equivale a las emisiones anuales estimadas de la ciudad de Leeds, en el Reino Unido[3].

*Emisiones de Alcance 1: todas las emisiones directas que proceden de las operaciones de una organización o bajo su control. Esto incluye la combustión de derivados del petróleo en sus instalaciones, emisiones de la flota propia de vehículos y emisiones “fugitivas”. Emisiones de Alcance 2: emisiones indirectas relacionadas con la compra o uso de electricidad por parte de la compañía. Las emisiones podrán ser almacenadas durante el proceso de producción de la energía y utilizadas posteriormente por la organización.

DS Smith es un líder sectorial en envasado sostenible que demuestra el potencial del reciclaje de circuito cerrado, un proceso mediante el cual los residuos se recogen, reciclan y reutilizan para fabricar el mismo producto original. Empleando materiales reciclados en sus cajas de cartón corrugado, M&G estima que la compañía británica evita la tala de 55 millones de árboles al año.

El mayor cliente de DS Smith es el gigante de comercio online Amazon, que aporta a sus operaciones una escala e impacto enormes.

  • Impacto: Las actividades de DS Smith brindan un ahorro neto de algo más de 650.000 toneladas de CO2 por año. Esto equivale a dotar a 120.000 viviendas de electricidad sin emisiones[4].

Trex es el mayor productor mundial de suelos compuestos para terrazas y exteriores. Esta alternativa es más duradera y sostenible que los suelos de madera, que representan la mayor parte de este mercado. Trex también tiene su propia red para recoger plástico y madera usados, lo cual evita que vayan a parar a vertederos. Los suelos compuestos de Trex son más resistentes, duraderos y de fácil mantenimiento que los tradicionales de madera. También evitan muchos de los aspectos de producción y mantenimiento intensivos en recursos asociados con estos últimos.

  • Impacto: En 2019, los suelos de Trex emitieron un 42% menos de GEI que los tratados con cobre alcalino cuaternario (ACQ)[5].

Fuente de los casos de estudio: sitios corporativos web de las compañías Ball Corporation, Brambles, Darling Ingredients, DS Smith y Trex. Estas cifras se basan en la información disponible más reciente de la documentación e informes de cada compañía.

Los puntos de vista expresados en este documento no deben considerarse como una recomendación, asesoramiento o previsión. No podemos ofrecerle asesoramiento financiero. Si no está seguro de que su inversión sea apropiada, consúltelo con su asesor financiero.

Esta información no constituye una oferta ni un ofrecimiento para la adquisición de acciones de inversión en cualquiera de los fondos de M&G. Promoción financiera publicada por M&G International Investments S.A. Domicilio social: 16, boulevard Royal, L-2449, Luxembourg.


[1] Fuente: https://nepis.epa.gov/Exe/ZyPDF.cgi?Dockey=P100U8YT.pdf

[2] Fuente: Brookfield Renewable Partners III report (pág. 24).

[3] Fuente: Leeds Carbon Roadmap report, pág. 2

[4] Fuente: Brookfield Renewable Partners III report (pág. 24).

[5] Fuente: La fuente de información proviene del informe de sostenibilidad de la empresa, disponible en su sitio webtrex-sustainability-report-catalog_d15-sspdf.pdf  (Pág. 31)

La economía circular como solución para el cambio climático

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Autor: Ben Constable-Maxwell, Director de inversión sostenible y de impacto en M&G Investments

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Mientras la sociedad global lucha contra la pandemia de COVID-19, resulta difícil ignorar las manifestaciones físicas del cambio climático. Las imágenes apocalípticas de incendios forestales en California, que han consumido más de 800.000 hectáreas en lo que va de año, contrastan con el retroceso del hielo ártico debido a temperaturas récord en la región. 

Se prevé que el periodo de cinco años transcurrido desde la firma del Acuerdo de París sobre cambio climático en 2015 habrá sido el más cálido desde que se registran datos. Las partes que ratificaron dicho acuerdo se comprometieron a esforzarse para limitar el aumento de la temperatura mundial media a 1,5° C por encima de los niveles preindustriales, lo cual se traduce en cero emisiones netas de gases de efecto invernadero (GEI) de cara a 2050. 

Tal como ha dejado claro el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC), si no logramos recortar drásticamente las emisiones nos arriesgamos a sufrir daños irreversibles en los ecosistemas y la economía globales. Por consiguiente, es sumamente urgente identificar e implementar soluciones.

Hasta ahora, la atención se ha concentrado en descarbonizar el sistema energético migrando hacia fuentes de energía renovable y mejorando la eficiencia energética. No obstante, existe otra respuesta a este desafío que de momento se ha pasado por alto: la economía circular.

«La transición hacia las energías renovables juega un papel vital en la lucha 
contra el cambio climático, pero no será suficiente. Para lograr los objetivos climáticos, 
es crucial que transformemos el modo en que diseñamos, producimos 
y utilizamos los productos y alimentos que consumimos.»

Dama Ellen MacArthur, fundadora de la Fundación Ellen MacArthur

Reducir, reutilizar y reciclar

La economía circular es una alternativa al modelo lineal tradicional de «extraer, producir y tirar» en base al cual los recursos se extraen, utilizan y desechan al final de su vida. Los tres principios de la economía circular (eliminar residuos y contaminación desde el diseño, mantener productos y materiales en uso el máximo tiempo posible y regenerar los sistemas naturales) representan una plantilla para solucionar muchos retos globales apremiantes.

Se estima que el mundo genera 2000 millones de toneladas de residuos sólidos cada año. Los procesos de «ciclo cerrado» basados en estos tres principios pueden permitir al mundo desvincular el desarrollo económico a largo plazo de la extracción de recursos, además de reducir la generación innecesaria de residuos y mitigar los riesgos de escasez de materias primas. Pero un aspecto crucial es que el paso a una economía circular puede desempeñar una función esencial en la lucha contra el cambio climático, al respaldar la transición a una economía de bajas emisiones y con un uso de recursos eficiente.

Aunque en torno a un 55% de los GEI proceden del sector energético a través de la quema de combustibles fósiles para la generación de energía, calor y transporte, el 45% restante

procede del modo en que producimos nuestros productos y alimentos. Sin abordar esto último, ni siquiera nos acercamos al logro de los objetivos del Acuerdo de París.

Cerrar el ciclo para el planeta

Los principios de los procesos circulares pueden aplicarse para reducir las emisiones en todas las áreas de la economía, pero tendrán inevitablemente un impacto considerable en ciertos sectores. 

Las industrias del cemento y del acero, por ejemplo, son dos de las más intensivas en carbono: se estima que en su conjunto representan de un 12% a un 14% de las emisiones globales. En el caso del acero, sustituir mineral de hierro y carbón con chatarra reciclada puede limitar la extracción de recursos, la deforestación y la contaminación. Para el cemento, el empleo del carbono emitido por otras industrias como materia prima en el proceso de fabricación puede reducir las emisiones.

En otro ejemplo, los residuos y pérdidas alimentarios representan un 6% de los GEI globales. Además de eliminar residuos en toda la cadena alimentaria a través de un mejor diseño, los procesos circulares podrían servir para regenerar los sistemas naturales (y potenciar la productividad agrícola) utilizando residuos orgánicos como materia prima para regenerar el suelo y capturar carbono.

Algunas compañías ya han adoptado la circularidad en sus modelos de negocio y están avanzando mucho hacia procesos de ciclo cerrado capaces de superar retos de sostenibilidad. DS Smith es una empresa líder en el sector de envasado sostenible y reciclable; las fibras en su papel y cartón (producidas a partir de fuentes renovables) pueden ser reprocesadas en sus fábricas y reciclarse hasta 25 veces. Por su parte, el grupo de logística global Brambles está recortando considerablemente sus emisiones de carbono y su uso de agua reutilizando sus cajas y palés. 

Oportunidades de negocio sostenibles

La economía circular consiste en optimizar el uso de los recursos y eliminar los residuos. La adopción de principios de ciclo cerrado en el diseño de productos y modelos de negocio, sobre todo cuando son intensivos en carbono, puede reducir drásticamente las emisiones de GEI. 

No obstante, también tiene sentido desde un punto de vista financiero. En un mundo en el que cabe esperar un aumento del coste de la contaminación y de los residuos, diseñar y fabricar productos teniendo en cuenta desde un principio su eliminación, la reducción de residuos o su posible reutilización es una forma de pensar inteligente y a largo plazo.

Ello también representa una enorme oportunidad. Accenture estima que la transición hacia una economía circular es una oportunidad de crecimiento global de 4,5 billones de dólares hasta 2030.

Las empresas que interioricen con éxito la economía circular deberían estar, en nuestra opinión, mejor posicionadas para aportar a sus inversores rentabilidades sostenibles a largo

plazo, pero también tener como objetivo suponer un impacto positivo considerable en el planeta al ayudar a combatir el cambio climático.

El valor y los ingresos de los activos del fondo podrían tanto aumentar como disminuir, lo cual provocará que el valor de su inversión se reduzca o se incremente. Es posible que no recupere la cantidad invertida inicialmente.

Los puntos de vista expresados en este documento no deben considerarse como una recomendación, asesoramiento o previsión. No podemos ofrecerle asesoramiento financiero. Si no está seguro de que su inversión sea apropiada, consúltelo con su asesor financiero.

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